El cuarto de baño es una de esas estancias de la casa que causa de todo menos indiferencia. Cómo la dispongamos sirve para adquirir un plus de comodidad a la par que aporta a la casa un extra de personalidad. Eso sí, por desgracia, no siempre disponemos de suficiente espacio como para poder instalar esa bañera estilosa con acceso mediante escalones que tantas veces vemos en películas, ni el presupuesto de reforma de baño en Barcelona necesario como para cubrir de mármol cada rincón (algo que por otra parte no siempre favorece).
Por esta razón, sea como sea nuestro cuarto de baño, ya sea el principal o un cuarto de aseo, os queremos ofrecer una serie de consejos que os ayudará a reformar el baño con poco espacio y con un presupuesto igual de ajustado.
Ganar espacio: objetivo número 1
Lo sentimos si no te quitas de la cabeza esas bañeras exentas tan glamurosas desde las cuales darse baños de espuma y poder sacar los brazos con pose relajada. La falta de espacio requiere ganarlo a partir de unir practicidad y comodidad. Y aunque estas bañeras cómodas lo serán bastante, impedirán que puedas moverte con fluidez o le restará espacio al resto de equipamientos igualmente necesarios.
Por ello, cada vez que se te presente la oportunidad (esto quiere decir, que no renuncies ni al diseño ni a la comodidad por ello), apuesta por lo compacto: placas de ducha en vez de bañera, lavabos con cajoneras integradas, W.C. con la cisterna oculta o de pequeñas dimensiones, etc.
Prescinde de lo innecesario
Como conjunción con la anterior idea, haz un ejercicio de minimalismo y recurre únicamente a lo que realmente necesitas en tu baño. ¿Realmente haces un uso práctico del bidet?, ¿podrías sacrificar un armario toallero y hacer uso únicamente del mueble del lavabo?, ¿realmente necesitas que todos esos juegos de toallas queden a la vista?
Respóndete previamente a estas preguntas y, en consecuencia, evita sobrecargar el espacio con compartimento y útiles de aseo innecesarios.
Juega con texturas y colores
Un baño pequeño no es sinónimo de baño aburrido. La mejor forma de compensar la falta de espacio es llenarlo con pequeños detalles que no sobrecarguen pero sí digan mucho más que un azulejo plano o el aséptico blanco cerámico.
Por ello, no dudes en, asesorado por interioristas, jugar con tonalidades, texturas, materiales… Revestimientos en relieve, azulejos que se combinen con cenefas cerámicas en forma de mosaico, motivos que se alternen… Tienes miles de recursos a tu disposición.
Aprovecha la luz
Si puedes contar con luz natural, despeja el ventanal de cualquier obstáculo que le impida que lo inunde todo. Si no es el caso, juega con los espejos, con la iluminación y con el espacio vacío para potenciar la sensación espacial.
Los tonos claros, prolongar el material del suelo hacia la pared, despejar el espacio a ras de la solería (por ejemplo elevando unos centímetros el mueble del lavabo y dejándolo anclado únicamente a la pared), son otros trucos que servirán para que a vista de nuestros ojos el baño parezca más grande.